miércoles, 15 de junio de 2016

Examen gratuito B1-B2: Una victoria del movimiento estudiantil


Desde la Coordinadora Sindical Estudiantil (CSE) queremos manifestar públicamente nuestra alegría al recibir la noticia de que los órganos de gobierno de la Universidad de Granada (UGR) han aprobado un presupuesto para ofertar, de manera gratuita, el examen de acreditación lingüística nivel B1 y B2 en inglés, francés, alemán e italiano para todas las estudiantes de la Universidad a partir de septiembre de 2016. Esta medida ha sido acompañada de la ampliación del Centro de Lenguas Modernas, con nuevas sucursales en Cartuja y el PTS, además del anuncio de una nueva en el campus de Fuentenueva y de la oferta de cursos específicos para la prueba de 20h y 30h por menos de 200€, junto con una ampliación de la beca de formación (hasta 300€) a todas las alumnas que hayan recibido en alguno de sus cursos de grado una beca MEC.

Creemos que estas medidas ofrecen una mejora sustancial en las condiciones de formación del conjunto de la comunidad estudiantil que, en plena crisis social y económica, se veía obligada a hacer frente al precio del examen, así como en muchos casos a la formación requerida para prepararlo a través de academias externas. B1 en un idioma moderno, como sabemos, es exigencia de la ley que deben acreditar todas las estudiantes de grado de la UGR.

La CSE lleva desde el año 2013 reivindicando la gratuidad de la acreditación lingüística que nos exige la ley en general, y la UGR en particular, a través de las movilizaciones y huelgas que hemos convocado para lograrlo desde que empezara esta campaña tan larga. Hemos tratado siempre de convencer a todos los sectores de la universidad de la necesidad de acabar con las contradicciones entre las exigencias de la ley y las armas que se ofrecen al estudiantado para lograr una formación mejor y más justa. Fruto de todo este trabajo fue la inclusión del examen de B1 gratuito en el programa electoral de las dos candidaturas a rectorado en las elecciones del curso pasado.

Queremos poner de manifiesto que estas medidas son, sin duda, una victoria de la movilización de las estudiantes, de la reclamación constante y paciente de un trato más justo para las estudiantes y del no abandono de las reivindicaciones durante este primer año de rectorado de Pilar Aranda, que ha notado en todo momento la presión de las estudiantes pidiendo respuestas. Ocurre, de la misma manera, que el caso de la UGR ofertando de manera insólita (siendo en esto la primera y, por ahora, única universidad del Estado Español) el examen de B2 de forma gratuita es respuesta a la campaña concreta llevada por la CSE hasta el Claustro Universitario, en el que entregamos más de 100 firmas en las que las estudiantes del Grado en Bioquímica que exigían la gratuidad de su formación en inglés, para el que exigían un B2 acreditado antes de titular.

Por último, invitamos a toda la comunidad estudiantil a reflexionar sobre la importancia de reivindicar nuestros derechos. La implantación de estas medidas habría sido imposible sin la movilización de las estudiantes. La CSE invita a toda la comunidad a alegrarse y sentirse recompensada por tanto esfuerzo en el logro de estas medidas. Pero no nos conformamos, seguimos queriendo que los grados en los que se curse el nivel de B1 en idiomas modernos estén exentos de acreditación, que la formación lingüística en la UGR sea totalmente gratuita como un organismo realmente público debería ofertar y que el CLM pase a ser de gestión realmente pública y de acceso libre para lxs estudiantes. Por este y por otros objetivos que nos ayuden a conseguir una educación pública, gratuita y de calidad, como la bajada de las tasas universitarias, la discusión democrática sobre el calendario académico y el no a la implantación del 3+2, nosotrxs animamos al conjunto estudiantil a reivindicar nuestros derechos y a seguir construyendo movimiento estudiantil porque los resultados demuestran su utilidad.

Si no luchamos, nadie nos escucha.



Panfleto maquetado


jueves, 2 de junio de 2016

El cambio de calendario del curso en la UGR: Un proceso antidemocrático en detrimento del alumnado

Esta mañana se aprueba en el Consejo de Gobierno de la Universidad de Granada el cambio de calendario académico. Este proceso, que se ha dado a lo largo del curso en un ambiente de falta de difusión, desinformación, y secretismo. Al fin y al cabo, es un proceso en el que las estudiantes no han tenido ningún papel. La Delegación General de Estudiantes, en una reunión de apenas 24 personas, ha usurpado la voz de las alumnas y carece, en este tema, de la legitimidad necesaria para imponer su criterio en nombre de todo el mundo.

La Coordinadora Sindical Estudiantil exige, dadas estas cuestiones, que se ponga en marcha un proceso plebiscitario, con carácter vinculante, que permita abrir un debate serio y libre sobre qué es más conveniente para el alumnado. Creemos que un consejo de gobierno presidido por una rectora que se auto describe como defensora de la voz de las estudiantes no puede, en ningún caso, tomar una decisión que afecta al futuro de la enseñanza en esta universidad sin tener en cuenta la opinión de las propias estudiantes que, a fin de cuentas, son las que tienen que organizar su vida académica.

No solo abogamos por un proceso democrático, sino que nos posicionamos en esta cuestión. Teniendo en cuenta las experiencias de todo el Estado en este tema, sabiendo de manera más directa qué suponen estos cambios para las estudiantes más vulnerables, las trabajadoras, nos negamos a reconocer este cambio como positivo, y presentamos los siguientes argumentos preliminares:

  • La dificultad de conciliación laboral y estudiantil: El adelanto de un mes supone una dificultad añadida para quienes trabajan en periodo de Navidad, y que nada más terminar deben examinarse.

  • La mayor dificultad para planificar las recuperaciones: La reducción del tiempo entre las convocatorias ordinarias y las extraordinarias no permite ni la reflexión sobre las asignaturas recién suspendidas, debido al solapamiento del tiempo intermedio y el tiempo de entrega de notas. En las asignaturas de 1er cuatrimestre tienen menos tiempo de preparación, y su repaso empieza de cero.

  • La imposibilidad de poder tratar con un mayor número de asignaturas para recuperar, debido precisamente a la reducción de tiempo. Las estudiantes que trabajan tienen mayor dificultad para separar las asignaturas de cada convocatoria. Esto facilitará el absentismo en la convocatoria de recuperación y el posterior aumento del precio de la matrícula para quienes no puedan con estos tiempos.

  • No existe la garantía de que se aplique el cambio de manera correcta. En otras universidades, como pasa en Córdoba, no han logrado ejecutar el cambio y tienen periodos de exámenes en julio Y también en septiembre, ya empezado el curso académico.

Sabemos los argumentos que ponen desde la institución, y creemos que no tienen en cuenta ninguna de las cuestiones más serias. Creemos que argumentos como tener “vacaciones de verdad” no atienden a la realidad de las estudiantes que necesitan estar adaptadas a los tiempos del mundo laboral para poder seguir estudiando, y creemos que este cambio facilita la expulsión de estudiantes de la universidad.